Un paréntesis

¿Recuerdas lo que quedó pegado en el asfalto del gato que atropellaron? Ahí estoy yo. ¿Has visto los restos de donde había una casa y ahora solo hay cascajo, varillas y basura? Ahí estoy yo. Y esos pedazos de autos accidentados afuera de los ministerios públicos, ahí estoy yo. ¿Te ha llegado el olor del agua podrida en donde una vez hubo flores frescas pero ahora están muertas? Ahí también estoy yo. Y ese cóctel de día y de noche me quitó el dolorcito en el estómago cada que topo cada una las situaciones anteriores. También la sonrisa al escuchar mi canción favorita, el humor juguetón para mis perritas, las lágrimas para mis muertos, el hambre, el impulso para levantarme en la mañana y el gusto por la compañía en la cama. Me aferro al baile, a la escritura, a la vida, pero quizá un día sea yo.

Comentarios

  1. Los cocteles curan el alma, más cuando se comparten, te mando apapachitos!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Majestuosa

Lechuza